Índice - Temas Afines

Translate Traductor

Armagedón se intensifica, pero podemos mitigarlo

Los Ángeles no permiten que en la Tierra se extinga la Vida que procede de Dios, con toda su belleza y su extensa evolución. Esto sería el gran triunfo de Satanás en su actual intento de terminar con toda la vida humana en el mundo.

Cristo vino con el propósito de, con Su Sangre Purificadora, quitar el pecado del mundo porque la humanidad ya estaba perdida y bajo la total esclavitud del Mal. Y ahora Satanás ha vuelto a dominarla, pero esta vez la maldad será eliminada mediante fuego purificador.

Y a
unque aparentemente, Satanás está por ganar su batalla contra el Bien, eso sólo significa que el Armagedón intensificará y prolongará el enorme sufrimiento humano. Pero podemos mitigarlo mediante la Fórmula Divina, Padre Nuestro.

 * * * * * * *  

- ¡Señor, enséñanos a orar!

- "Cuando oréis decid":

Padre Nuestro que estás en el Cielo.

Santificado sea Tu Nombre.

Venga a nosotros Tu Reino.

Hágase Tu Voluntad en la Tierra, como en el Cielo.

El pan nuestro de cada día dánoslo hoy.
Perdónanos nuestras deudas, así como
nosotros perdonamos a nuestros deudores.

No nos dejes caer en la tentación.

Y líbranos del mal.

 * * * * * * * 

​Sólo con la Fórmula Divina, Padre Nuestro

Indetenibles avanzan las acciones para despoblar el mundo y efectuar el "reinicio". Ya tienen todo listo para producir hambrunas y crisis económicas mundiales, así como otros crímenes contra la humanidad que cometerán en el 2025. Todo esto, con el propósito de matar a 7 mil millones de humanos y esclavizar a otros mil millones.


Cristo vino con el propósito de, con Su Sangre Purificadora, quitar el pecado del mundo. Pero la humanidad ha vuelto a caer bajo la esclavitud del Mal; y esta vez la maldad será eliminada mediante el fuego purificador de este Armagedón.


Vemos como aumentan las tragedias en todo el mundo, y que son cada vez más graves e irremediables, pero el Mal no vencerá, finalmente triunfará el Bien aunque con un elevado costo en sufrimiento humano. Y ese gran sufrimiento ya únicamente podemos mitigarlo y abreviarlo mediante la Fórmula Divina, Padre Nuestro.