Y aunque aparentemente, Satanás está por ganar su batalla contra el Bien, eso sólo significa que el Armagedón intensificará y prolongará el enorme sufrimiento humano. Pero podemos mitigarlo mediante la Fórmula Divina, Padre Nuestro.
* * * * * * *
- ¡Señor, enséñanos a orar!
- "Cuando oréis decid":
Padre Nuestro que estás en el Cielo.
Santificado sea Tu Nombre.
Venga a nosotros Tu Reino.
Hágase Tu Voluntad en la Tierra, como en el Cielo.
El pan nuestro de cada día dánoslo hoy.
Perdónanos nuestras deudas, así como
nosotros perdonamos a nuestros deudores.
No nos dejes caer en la tentación.
Y líbranos del mal.
* * * * * * *